Unos minutos antes de que la iglesia comenzara la misa, la congregación de feligreses estaba sentada en sus banca rezando y hablando un poco. De repente, Satanás se apareció en el frente de la iglesia. Todo el mundo comenzó a gritar y correr por la puerta trasera, atropellandose unos a otros en un esfuerzo desesperado por escapar de la encarnación del mal.
Pronto, la iglesia se quedó vacía, salvo por un anciano que estaba sentado tranquilamente en su banco, sin moverse, aparentemente ajeno al hecho de que el principal enemigo de Dios estaba en su presencia.
Así que Satanás se acercó al hombre y le dijo:
"¿Sabes quién soy?" El hombre respondió: "Sí, claro que sí."
"¿No tienes miedo de mí?" Satanás le preguntó. "No". dijo el hombre. ¿No te das cuenta de que te puede matar con una sola palabra? ", Preguntó Satanás." No lo dudo ni por un minuto ", replicó el anciano, en un tono calmado y uniforme.
"¿Sabía usted que le puedo causar una profunda y horrible agonía para toda la eternidad?" persistió Satanás. "Sí", fue la respuesta en tono bajo y calmado.
¿Y usted todavía no tiene miedo? " preguntó a Satanás. -No-dijo el viejo-.
Pasan unos minutos y ya un poco perturbado, Satanás le preguntó: "¿Por qué diablos no tienes miedo de mí?" El hombre respondió con calma:
"Porque parece ser que he estado casado con tu hermana desde hace 48 años!" ...
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