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domingo, septiembre 16, 2007

Servicio al Perro...

Ups, quiero decir Servicio al Cliente.

A veces pienso el por qué en mi país, que se caracteriza por obtener ingresos en base a una economia de servicios, hay un gran numero de tiendas y comerciantes, por no decir la gran mayoria, que ofrecen un servicio mediocre simplemente por no poner las reglas claras con el cliente.

En mis veces de consumidor he notado que el cliente facilmente se confunde en los procesos de adquirir un producto y/o servicio, ya que las tiendas y los centros de servicios se están se empeñando más en vender (o terminar en tiempo record el servicio) y no en tomarse un tiempo para hacer un trabajo eficiente y dejar al cliente bien satisfecho.

Escribo sobre esto, precisamente porque he vivido en carne propia muy malas experiencias en torno a estos casos, y como se dice en buen dominicano, "estoy jaaarto de que me engañen".

De mis malas experiencias, me ocurrió una recientemente, que me puso los cabellos de punta (y porqué no, los pelos tambien) por la encojoná que me di con un mal servicio que le hicieron al carro mio.

Lo que ocurrió fue que una tarde detecté que al carro habia ya que cambiarle las bandas de los frenos porque estaban chillando y ya habian cumplido su vida util. Entonces me dirijí a "Tecnafrenos", gente que sabe de frenos, segun su lema, y aquel dia me dieron una atención buena y me le cambiaron las bandas de frenos, hasta ese dia todo marchaba bien. El carro estaba nítido.

Pues, al cabo de dos semanas, comienza a sonar un ruido extrañísimo como si el carro tuviese algo atravesao. Lo primero que me llegó a la mente fue ir con mi factura a "Tecnafrenos" y exigir una explicación. Entonces ya en el lugar, presenté mi factura y ellos accedieron sin problemas a chequiarme el carro. Paso unos 10 minutos, y me dicen que el problema que tiene es algo comun y pasajero, que con el tiempo ese ruido se quitaba todo volvía a su normalidad. Yo, como ignorante al fin sobre mecánica automotriz, me comí ese cuento y me fui, claro está con mi factura en mano por si acaso.

Luego de una semana, andando en el carro no aguantaba ese ruido al frenar y decidí llevarlo para que me le cambiaran las bandas por unas nuevas. Pues, cuando voy me sale el mismo personaje de servicio al cliente que me atendió la vez pasada, y esta vez me dice que porqué he vuelto para allá y le exlico que ya no aguanto ese ruido y que por favor que me cambiaran las bandas de frenos por otras. El tipo rapidamente me montó el verbo y me dijo sin titubear que lo que pasó es que dichas bandas de frenos no son muy buenas y que lo más que podia hacer era avestarlas mientras tanto y volver despues del fin de semana, ya que era viernes y estaban ya casi por cerrar el local. Pues, procedieron a ajustar las bandas y logrando que no chillaran al frenar me entregaron el carro.

Ahora viene El palo:

Lunes despues del fin de semana, me dirijo hacia el local, y taraaán, los malditos lo habian vendido, y a unas personas que por lo que sé, se van a dedicar a otros negocios.
Se me hacia difícil tragar, después de saber que en todo ese tiempo lo unico que logré fue pasar por tonto pensando en que todavía se puede confiar en la gente.

Bueno, para terminar el cuento y no cansarlos mas, tengo que decir que tuve que ir a otro centro de servicios llamado "Frenos Lope de Vega", donde me atendieron nitidamente y me explicaron con detalles todos las causas del porqué dichas bandas de frenos chillaban y me vendieron otras de un material diferente y mucho mejor que las de antes. Y hasta el sol de hoy no he vuelto a tener problemas.

Es sencillo, cuando se quiere hacer las cosas bien, terminan haciendose bien.

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